Lo primero que hay que decir es que son las productoras y distribuidoras las que deciden en qué categoría van a promocionar a los actores y actrices de sus películas. Es decir, si hay dos protagonistas dignas de ser nominadas por una misma película, una de ellas puede ser propuesta en la categoría de reparto para evitar que compitan entre sí.
Bette Davis y Anne Baxter rivales
Es lo que tenía que haber pasado con Bette Davis y Anne Baxter en Eva al desnudo (1950), pero la segunda se negó a que la mandasen a la categoría de reparto, ambas fueron nominadas como protagonistas y perdieron el Oscar. En 1985, muchos años después, Baxter confesó que se equivocó. “Debí conformarme con otro Oscar como actriz de reparto (el primero lo ganó en 1947 por Al filo de la navaja), así probablemente Bette hubiera ganado el suyo”. Cuando alguien le contó a Davis este arrepentimiento tardío, la actriz se limitó a decir: “Sí, eso debería haber hecho”.

Ese es el caso que nadie olvida, aunque de vez en cuando vuelve a pasar. Burt Lancaster y Montgomery Clift compitieron en la categoría principal por De aquí a la eternidad (1953), pero si el segundo hubiera pasado a actor de reparto es muy probable que hubiera ganado ese Oscar que nunca le dieron. También ocurrió con Susan Sarandon y Geena Davis por Thelma & Louise (1991).

Zoe sale menos en Emilia Perez que Karla Sofia
Así las cosas, este año han mandado a Zoe Saldaña a la categoría de actriz de reparto por Emilia Perez, una manera como otra cualquiera de asegurar el premio para la actriz porque su personaje, la abogada Rita, es la gran protagonista de la historia, la que mueve la trama. La actriz de Avatar está en pantalla exactamente 57 minutos y 50 segundos mientras que Karla Sofia Gascón, nominada en la categoría principal, sale menos: 52 minutos con 21 segundos. Uno podía pensar que decidieron promover a la española como protagonista porque su personaje da título a la película y los focos iban a estar puestos en ella. Una teoría discutible porque Vanessa Redgrave interpretó a Julia en la película del mismo título estrenada en 1977 y ganó el Oscar como actriz de reparto, que es la categoría que le correspondía porque la protagonista era Jane Fonda. El personaje de Anne Baxter también estaba en el título de su película con Bette Davis, pero esta arrasaba como Margo Channing y se hacía con todo el espectáculo.
En cualquier caso, Saldaña es favorita para llevarse el Oscar, pero la pregunta es: ¿no lo hubiera sido también Karla Sofia Gascón de haber sido ella la nominada en ese apartado? Claro que, a estas alturas, con todo el mundo renegando de ella, la actriz española ya no es favorita de nada.

David Niven y Anthony Hopkins, Oscar protagonistas… por poco
Estas maniobras orquestadas en la oscuridad provocan casos de lo más extraños cuando no ridículos. Por ejemplo, David Niven por Mesas separadas (1958) y Anthony Hopkins por El silencio de los corderos (1991) ganaron el Oscar en la categoría de actor protagonista por 15 y 16 minutos en pantalla respectivamente, las interpretaciones más cortas en ganar en esa categoría. La de Spencer Tracy en San Francisco (1936), 14 minutos y 58 segundos, es la más corta en ser nominada en una actuación principal.

Jennifer Jones, una actriz de reparto muy presente
El récord de interpretación protagonista nominada en la categoría de reparto no lo tiene Zoe, lo tiene Jennifer Jones. Con 1 hora, 15 minutos y 38 segundos, su trabajo en el melodrama Desde que te fuiste (1944) es la más larga jamás nominada a un Premio de la Academia a la Mejor Actriz de Reparto. La película tiene una duración total de 2 horas y 57 minutos. El productor era el legendario David O. Selznick, que en ese momento tenía una relación con la actriz, con la que años después se casaría.
Christoph Waltz, secundario con mucha proyección
En la categoría masculina, el récord de interpretación más larga en ganar un Premio de la Academia al Mejor Actor en un papel secundario lo tiene Christoph Waltz por Django desencadenado (2012) con una hora, seis minutos y diecisiete segundos en pantalla.